Prosperar en tiempos de crisis o recesión requiere mayor diligencia y habilidad que durante épocas económicas más favorables, si se tiene un buen plan administrativo financiero y un adecuado manejo del capital.
Invertir en el sector inmobiliario a corto, mediano o largo plazo incrementa el valor del dinero a futuro, es una de las industrias de mayor rendimiento y no es necesario contar con un poder adquisitivo alto para adquirir un inmueble.
Aquí te presento 5 pasos para elaborar tu propio plan inmobiliario, para incrementar tú patrimonio familiar, generando capital en tiempos de crisis.
- Liquidar deudas:
Se debe liquidar toda deuda obtenida mediante créditos, ya que los intereses que generan llegan a desestabilizar la economía. El no hacerlo significaría un problema para alcanzar la estabilidad económica y más aún en tiempo de crisis, ya que la pueden poner en riesgo.
- Hábito ahorrar:
Es recomendable crear constancia en ello para ir formando un hábito para que a la larga no genere un problema en guardar cierta cantidad de dinero, por lo que hay que ponerse objetivos alcanzables y reales de acuerdo a tu presupuesto. A partir de esto se podrá ir conceptualizando el proyecto de inversión que mejor le convenga a sus necesidades y objetivos de vida.
Aquí es bueno utilizar una de las reglas de oro del libro «El hombre más rico de Babilonia». La regla es clara, debes ahorrar al menos 10% de lo que ganas, para después hacer un buen uso de este dinero. ¿Y qué hacer si en este momento no te puedes permitir ahorrar tanto? Entonces empieza con 1, 3 o 5% para finalmente llegar a 10 o un porcentaje más alto.
- Determinar el tipo de inversión:
Con la idea del proyecto inmobiliario a invertir y el plazo (corto, mediano o largo), se inicia la identificación de la propiedad o terreno. Esto comprende la pre-estructuración financiera y legal del proyecto (presupuesto, modo y temporalidad de pago, firma de contrato), factibilidad (meta alcanzable económicamente, de acuerdo a lo planeado) y análisis de riesgos (estudio de las tasas de interés, inflación, créditos, etc.).
Es importante determinar cuál es la mejor estrategia financiera para este ingreso o capital, si se busca una rentabilidad de retorno de una inversión.
- Analizar el mercado residencial:
Esta es una pieza fundamental dentro del sector inmobiliario, por ser el más extendido y conocido. Los precios arrojados por los portales inmobiliarios son precios de oferta estimados según su contenido, por lo que no están recogidas todas las posibles rebajas o los precios reales finales de las transacciones. Además, se podrían reflejar sobreprecios, al incluir, por ejemplo: comisiones inmobiliarias (que es una práctica habitual).
- Estudiar la demanda potencial:
Analizar la zona o región donde se está invirtiendo en el inmueble, sitio geográfico, urbanización, seguridad, crecimiento económico, etc., ya que todos estos factores en su momento determinan la probabilidad de éxito en la venta del inmueble y en su valor adquisitivo.
Hoy estamos en un mercado de compradores y esto es atípico, porque existe la posibilidad de negociar el precio de los inmuebles; las tasas de interés están en niveles atractivos y accesibles, los bancos se mantienen en la línea de otorgar créditos, por lo que este proyecto de inversión se caracteriza por la realización de una fuerte inversión inicial, que se recupera, en el mejor de los casos, en el momento de venta del inmueble, lo que origina también una diferencia importante en los cálculos del valor residual