Facilidades para el pago del pie y seguros de cesantía son otros esfuerzos que remarcan las empresas.

Con fuertes rebajas, facilidades para comprar y otros incentivos, las inmobiliarias están mostrando señales del inicio de una “guerra de precios”. Esto, en medio de la fuerte caída en las ventas y un brusco aumento en el stock de viviendas nuevas, debido al efecto del coronavirus en la actividad económica.

Descuentos explícitos de hasta 1.000 UF para la compra de viviendas, disminuciones del 10% –que incluso se pueden traducir en más de 1.000 UF si se adquiere un producto caro– o “jugosas” gift card de más de $200 mil por recomendar el proyecto se advierten en las estrategias de diversas empresas para captar clientes para sus iniciativas en Santiago y Valparaíso. A eso se añaden otras facilidades para la compra como el pago del pie en 18
cuotas y seguros de cesantía.

A inicios de abril, Javier Gras, presidente de Empresas Socovesa, vaticinaba en entrevista con “El Mercurio” que se darían en el rubro “guerras de precios tácticas” en algunas zonas o comunas por sobreoferta. Hoy en el sector algunos actores son cautos y señalan que se trata de situaciones puntuales, pero otros advierten que los descuentos y promociones estarían recién comenzando, porque para las inmobiliarias significa una carga financiera grande quedarse con edificios desocupados.

Entre las campañas que se han avisado en los medios en los últimos días, está la de la Inmobiliaria Inspira. El gerente general de la firma, César Kattán, comenta que la iniciativa se compone de un seguro de cesantía “que busca dar tranquilidad a quienes están buscando comprar una vivienda en caso de que pierdan su trabajo y no puedan continuar con la compra”. Se agrega el pago del pie en 18 cuotas sin interés, con tarjetas de crédito, y un descuento del 10%, que está por sobre las rebajas habituales del 3% que ha realizado la empresa. Esto último se puede traducir en reducciones de más de 1.000 UF, considerando que se aplica a departamentos de hasta 14.000 UF, afirma.

Kattán señala que en marzo y abril han sufrido bajas en las ventas debido al impacto de las cuarentenas por covid-19, a la vez que suspendieron las inversiones en compras de terrenos.

La inmobiliaria Fudamenta también publicó descuentos de hasta 1.000 UF este fin de semana en un edificio de departamentos en La Dehesa, una de las zonas más complicadas por el alza del stock el primer trimestre de este año. La firma declinó contestar para este artículo. Fuentes del rubro indican que esa rebaja se estaba implementando desde hace meses en redes
sociales y solo hace unos días fue publicada en la revista VD de “El Mercurio”.

A los casos anteriores se suma la inmobiliaria Absal con descuento adicional de 100 UF para reservas online de departamentos. Bricsa afirmó hace unos días que mantenía rebajas para un proyecto en Chicureo.
Vicente Domínguez, director ejecutivo de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI), indica que la presencia de descuentos “no es una situación generalizada, sino que responde a nichos de mercado donde hay manifiesto desequilibrio entre oferta y demanda”

Domínguez agrega que “hay mucha mayor presencia comercial de las inmobiliarias en redes sociales y, por lo tanto, a mucha gente le empiezan a llegar ofertas que antes no recibían. Las firmas con las cuales he tenido contacto están contentas con la respuesta que han tenido con la comercialización de viviendas por medios digitales”.

Marcela Martínez, presidenta de la Cámara Nacional de Servicios Inmobiliarios (ACOP), asegura que hoy se advierten más facilidades para la compra de una vivienda y prevé que “seguirá habiendo más promociones, pues para las inmobiliarias tiene un costo financiero enorme quedarse con las viviendas”. Advierte, de todos modos, que pese a los esfuerzos en las ofertas, las ventas no aumentarán demasiado por la merma en los ingresos de las personas por la crisis.

PLAZOS PARA AGOTAR STOCK DE DEPARTAMENTOS SE DUPLICAN

La fuerte baja en las ventas de viviendas nuevas en el primer trimestre de este año generó que el inventario de casas y departamentos –especialmente estos últimos– registrara un fuerte salto.

Según informó ayer GfK Adimark, el plazo que se necesita actualmente para agotar el stock en oferta de viviendas nuevas en la capital llega a 41 meses, cifra superior a los 22,9 meses que se observaban en diciembre de 2019.

La situación más preocupante para el rubro se advierte en el segmento de departamentos, donde el tiempo para acabar con el inventario es de 46 meses –si se detuviera hoy la construcción de unidades–, casi el doble respecto de los 24 meses que se veían a fines del año pasado. Esta es la peor cifra al menos desde 2006.

En las casas, el lapso para agotar la oferta de unidades es de 21 meses versus los casi 17 con los que cerró 2019.

En el sector comentan que es inquietante la situación de Lo Barnechea, comuna que desde hace tiempo exhibe largos plazos para agotar stock. Esta vez se sitúa en 59 meses, más que duplicando los 22 meses registrados en diciembre.

La zona de La Dehesa es la que exhibe una alta oferta en esa comuna y donde se están dando las promociones más agresivas en precios, indican en la industria.

Vitacura, Providencia, Santiago y Ñuñoa también registraron en el primer trimestre un fuerte salto en esta materia.

Según los datos de GfK, en los primeros tres meses de 2020 se vendieron 3.471 unidades entre casas y departamentos, lo que representa una baja de 42, 2% frente al trimestre anterior, y una disminución de 60,6% si se compara con enero-marzo de 2019.

Se trata del registro más bajo desde el 2000, cuando el mercado resintió los coletazos de la “burbuja punto com”, señaló la consultora.

GfK también comentó que “los precios están mostrando una leve moderación, llegando a 77,7 UF/m{+2} en el caso de los departamentos y 63 UF/m{+2} para las casas”.

ARRIENDOS: PREFERENCIAS POR ESPACIOS CHICOS

El negocio de los arriendos de viviendas mantiene cierto movimiento, pese al fuerte impacto de la pandemia en la actividad económica y el empleo.

Pero en el sector identifican una tendencia relacionada con clientes que buscan viviendas más pequeñas. Estos, al tener un presupuesto más acotado actualmente, o bien por precaución, están optando por departamentos más baratos y, por ello, más chicos.

Así lo comenta Marcela Martínez, presidenta de la Cámara Nacional de Servicios Inmobiliarios (ACOP), quien señala que el mercado de arriendos estuvo frenado especialmente cuando varias comunas del sector oriente de Santiago estuvieron bajo cuarentena al mismo tiempo.

De todos modos, afirma que “el arriendo de vivienda usada se ha mantenido, hay alguna actividad, especialmente orientada a bajar costos y optar por unidades más pequeñas”.

Martínez reconoce que existe incertidumbre respecto del futuro desempeño de esta actividad, especialmente por la situación de la economía.

La titular de ACOP señala que las ofertas de viviendas nuevas con descuentos no impactan necesariamente al mercado del arriendo, ya que en el primer caso las promociones son aprovechadas por personas que adquieren unidades como inversión de largo plazo, mientras que quienes alquilan son individuos o familias que necesitan un lugar donde residir.

Sobre las ventas de viviendas usadas, Martínez comenta que se espera que las operaciones se posterguen si existe una tendencia de bajas de precios. “Cuando a un propietario le dicen que su vivienda cuesta un 20% menos, este se aguanta o solo venden los que están muy presionados económicamente”.

Asimismo, con relación a la comercialización de viviendas nuevas, indica que ha existido un alto nivel de desistimientos de compras de productos en “verde” o “blanco”, es decir, en fases previas a la edificación.

Fuente: Este artículo fue escrito por el periodista Marco Gutiérrez V., de Economía y Negocios de El Mercurio