El sector inmobiliario, cimiento económico de los hogares chilenos, se encuentra en una encrucijada de cambios significativos. Según cifras del Banco Central de Chile, este sector representa aproximadamente un 60% de la inversión de los hogares y un 50% de la deuda. Para entender cómo se perfilan los próximos meses en este ámbito tan crucial, debemos analizar tres noticias de alto impacto que han marcado el rumbo de la industria.
1. Baja en la tasa de interés del Banco Central:
Desde agosto de 2021, el Banco Central de Chile ha venido ajustando al alza las tasas de interés hasta alcanzar un máximo de 11,25%, el nivel más alto desde 2001. Sin embargo, en una sorpresiva decisión el viernes 28 de julio, la institución anunció una reducción de 100 puntos base, llevando la tasa a un 10,25%. Esta inesperada disminución se debe a la favorable evolución de la inflación, lo que promete insuflar nuevo vigor al mercado inmobiliario.
La inflación, previamente un factor desestabilizador en el rubro, ha comenzado a ceder, lo que conlleva que las personas puedan reevaluar sus decisiones de cambio de vivienda o inversión. Se espera que esta tendencia continúe, permitiendo a los compradores incorporar en sus análisis una UF que crece entre 3% y 4% al año.
2. Disminución de precios de vivienda en el primer trimestre del 2023:
El Índice de Precios de Vivienda (IPV) publicado por el Banco Central de Chile el 31 de julio reveló una caída del 3,1% en los precios de las viviendas a nivel nacional durante el primer trimestre de 2023 en comparación con el mismo período del año anterior. Tanto casas como departamentos experimentaron un retroceso del mismo valor, evidenciando la dinámica de un mercado que estuvo caracterizado por alta incertidumbre debido a factores económicos, políticos e inflacionarios.
Esta corrección en los precios era una reacción necesaria ante una demanda que había sido previamente impactada por las alzas de tasas de interés y restricciones crediticias, desencadenando un ajuste necesario para recuperar el equilibrio.
3. Caída en los Permisos de Edificación:
Los Permisos de Edificación, un indicador clave de la actividad en el sector de la construcción, han registrado su menor cifra desde 1991. La pandemia y sus consecuencias económicas llevaron a un aumento en los costos de materiales, costos laborales elevados, quiebra de constructoras y, por supuesto, una disminución de la demanda debido a las alzas en las tasas de interés y restricciones crediticias. Este panorama desafiante puso en pausa el lanzamiento de nuevos proyectos.
Perspectivas para el segundo semestre:
Sin embargo, hay razones para el optimismo. El acceso al crédito hipotecario mejorará gracias a las bajas tasas de interés, generando más liquidez en el mercado y abriendo las puertas a segmentos que antes no podían acceder a un financiamiento. Se anticipa un repunte en la entrada de nuevos proyectos a partir del segundo semestre de 2023, a medida que la demanda de los clientes se fortalezca gracias al acceso a financiamiento.
A pesar de la reducción de precios de vivienda en el primer trimestre, la demanda continúa superando a la oferta en el mercado inmobiliario. Los precios se espera que vuelvan a rebotar, especialmente con el mayor acceso a financiamiento que se espera en este segundo semestre.
La industria inmobiliaria históricamente se adelanta a los ciclos económicos, operando en base a expectativas, y este año no será la excepción. Con una inflación bajo control y un escenario más claro, se prevé que la actividad evolucione positivamente en este segundo semestre, brindando oportunidades a los inversionistas y reactivando un sector vital para la economía chilena.